Ese tío por el que todas suspirábamos en el cole no retuvo nada de ese sex appeal que, a finales de los 90, le encumbró como el Brad Pitt de nuestra generación. No es que el pobre chico no retuviera belleza, sino que nunca la tuvo ya que teníamos una percepción de la realidad un tanto atrofiada. Ya se sabe que, en la adolescencia, nos encanta crear mitos de la nada como cuando creíamos que los Back Street Boys o las Spice Girls eran leyendas de la música.
Después, está la tipología de hombre que te vuelve loca a ti y a nadie más. Alguien que te marcó y no estaba mal ante los ojos ajenos, pero no tanto como para que 10 años más tarde todavía te ponga nerviosa, siempre salga en alguna conversación y sea el primero que viene en la mente de la lista de tus ex. Con el tiempo, aprendes que con este tipo nadie puede tener una relación normal y si te dejó huella es por su toxicidad. A pesar de que nuestro subconsciente siempre lo cataloga de “muy guay”, no vale la pena. Es un tío tóxico.
Finalmente están los hombres por descubrir.Estos chicos interesantes que tienen que dejar de ser invisibles. Esos que ni ellos saben lo valiosos que son y por tanto nos pasan desapercibidos. En épocas de políticos con eslóganes populistas y demagógicos, titulares efectistas con textos vacíos, fotos pasadas por filtro que encumbran a instagramers en personas con una enorme influencia sin más mérito que unas bonitas fotos o poses, es lógico que este tipo de chicos sean invisibles ante los ojos millennials.
Para los que andan perdidos en esta tipología pondré ejemplos cinematográficos. Un chico invisible podría ser el personaje de Hugh Grant en Cuatro bodas y un funeral. A Andie MacDowell le hace gracia, es muy lovely pero, ya está, como mucho un pasatiempo. La prueba es que se casa con el supuesto tío 10 que en teoría está a su altura. En un año se divorcia. Y entonces descubre, de verdad, que ese tío que se encuentra en todas las bodas y le parecía encantador en realidad es muy interesante, alguien que vale la pena.
Ocurre lo mismo con el personaje de Domhall Gleeson en Una cuestión de tiempo. Rachel McAdams lo conoce en una cita a ciegas, no le desagrada, pero ya está. Él no es ese tipo de tío que sabe camelarse a un tía aunque sea hueco en todos los sentidos menos en su capacidad por conquistar. Pero gracias a un superpoder, puede ir y volver del pasado y a base de insistencia y mucha paciencia lo consigue. ¿Paciencia? ¿Qué es esto?
A veces creemos que no hay solteros treintañeros interesantes, pero quizá es que miramos con unos ojos viciados por el envoltorio exterior, es decir, las fotos de Instagram, los eslóganes resultones y por los titulares efectistas. Vuelve a mirarlo. Maquéalo con el rollo millenial / hipsteriano – ponle unas horas de gimnasio, una ropa más moderna, una timidez superada, una barba o unas gafas de pasta- y estoy segura que a tu lado aparece un tío más que interesante.
No es que estos atuendos lo hagan interesante, pero te “entrará más por los ojos” y dará pie a darle una oportunidad y a descubrir lo interesante que realmente es. Quizá él sí sabe tratarte como te mereces, sus temas de conversación tienen contenido y en instantáneas en vivo y en directo luce muchísimo. ¡Ah! Y tiene un sex appeal del que no te habías percatado. De hecho, muchas de nosotras solteras también estamos en este grupo, sólo hace falta saberlo, creérnoslo y comunicarlo al mundo exterior.
HOla Antonio, me apetece mucho ver Ex-machina, la nombran en muchos artículos. Así se parece un poco a "Her", aunque Phoneix se enamoraba de un sistema operativo que quizá es más chungo... Es verdad que la timidez hace mucho. Hace poco coincidí con un chico que me pareció muy normalito pero era tan simpático y encantador que tenía todas las chicas con él... llega a ser tímido y no se come ni un rosco. A nosotras nos pasa un poco lo mismo...
No hacen falta las gafas de pasta y la barba (sobran) ni las horas de gimnasio ni ropa moderna -mira que os gusta pedir-... sólo superar la timidez. Hace poco vi "Una cuestión de tiempo" y me gustó mucho. Te recomiendo "Ex-machina" también con Domhnall Gleeson. Al chaval le gustan los retos. O viaja en el tiempo para pillar cacho o se enamora de un robot.
Muchas gracias por tu comentario!!! Aunque hoy en día instageam y el cine tb distorsiona la realidad!!!
Me ha encantado, grandes verdades! Si ahora me pusieran delante al chico guapo del colegio por el que todas suspirábamos , probablemente ni lo miraría. Con los años cambia nuestra percepción, "madura" nuestro gusto y buscamos personas reales, alguien que sea más que una sonrisa perfecta.
Hola Laura! De hecho yo creo que la discreción está muy subestimada y "los notas" todo lo contrario... Y efectivamente, cuando alguien necesita hacerse notar es que hay poca miga!!!! Gracias por tu comentario. Un abrazo
Jajaja hay Isa qué rica eres me encanta el final de este artículo que dices como si nada. " De hecho, muchas de nosotras solteras también estamos en este grupo, sólo hace falta saberlo, creérnoslo y comunicarlo al mundo exterior." Por supuesto que sí, como que aunque seamos géneros diferentes, en lo que cuentas, somo iguales. Muy cierto, en esta época de mierda insgram facebook etc las personas menos notas muchas veces somos las que más valemos. Ser invisible no es lo mismo que valer poco, muy cierto ;-).
Hola María,
tienes razón, hay este cuarto grupo aunque se podría poner como subgrupo de estos hombres invisibles... Muchos chicos tímidos listoss hacen esas bromas ... pero que son flirteo!!! Me gusta que te guste mi blog! Millones de gracias!!!
Hay un posible tercer grupo y es el de el amigo de toda la vida con el que de repente, sientes algo más que amistad. Cualquier día las bromas no son tan bromas y todas las puntas y flirteos con segundas adquieren todo el sentido... y confunde un poco la realidad. Y ya para complicarlo todo, unamos kilómetros de distancia y que todo quede en anécdota. Venga, hasta luego!
Un besote, me encanta tu blog! :)