Cuando vi Cuatro bodas y un funeral, a mediados de los 90, es decir, cuando era una niña, me pareció una exageración que Hugh Grant tuviera que asistir a tanto enlace y que le produjese tanto estrés. Con el tiempo, una aprende a distinguir entre realidad y ficción, y acepté que nunca volaría como Superman, que Pretty Woman es una farsa y que las maratones nupciales del actor inglés eran una realidad como un templo.
Diréis que la generación Millenial no se casa, pero no sé si es que tengo una red de amistades más extensa de lo normal, que a los 30 la gente se pone nerviosa y decide pasar por el altar o que fui a una escuela más bien conservadora, que me he convertido en el blanco perfecto de las invitaciones de boda. Y es que los solteros/as son los invitados más preciados.
El motivo es sencillo (hablaré desde el punto de vista femenino porque es el que mejor conozco por mi experiencia):
Una soltera aporta glamour a una boda. Una sin compromiso se toma muy en serio lo de causar sensación con el vestido, el peinado, el taconazo (yo no puedo excederme si no quiero parecer un travesti) y el maquillaje por si un hombre libre se cruza en el aperitivo o se sienta a su lado en la mesa.
Nunca tendrá un comportamiento rancio. Bailará hasta las tantas, tonteará con todos los hombres solteros que pueda, reirá e intentará ampliar su círculo social.
Cierra la boda y te anima la fiesta hasta el final. Nunca se irá antes de que termine el baile, porque no pondrá excusas como que hace 10 noches que no duerme 7 horas seguidas o que el niño se ha puesto enfermo. No dejará en paz al DJ pidiendo todo tipo de canciones que le emocionen y al camarero con mezclas explosivas para las copas.
Organizadora de eventos profesional. Todas las preliminares de la despedida y de la celebración siempre pasarán por sus manos y cumplirá a rajatabla todas las actividades programadas.
Aunque sea políticamente incorrecto (si quieres ir de experimentada y cínica), a mi me encantan las bodas. Sin embargo, con el tiempo empiezo a perder este apego por ellas. Para empezar porque mi sueldo, cada vez más doliente con tanto recorte, sufre con cualquier gasto extra y más cuando es alguien que hace tiempo que no tratas y te invita porque das glamour, alegría, juventud y fiesta a su boda.
En segundo lugar, porque los solteros masculinos están en peligro de extinción. No sé quién se inventó eso de que de una boda sale otra boda, porque me parece la mentira más recurrente de los dichos populares. Quizá había solteros cuando tenía 25 años, pero ahora han desaparecido de la faz de la Tierra.
En este contexto, hay dos opciones en la vida de una: te sientan en una mesa llena de solteras (será que hay más mujeres en el mundo) y un soltero que es como tu hermano o te ubican con todo de parejas y matrimonios sintiendo, permanentemente, tu desencaje de bicho raro.
En el momento del baile, poco a poco, el volumen de personas disminuye consideradamente y dejas de toparte con la gente. A la que te das cuenta estás tú y el dj. Entonces es cuando piensas que es mejor ir a Luz de Gas con tus amigas que quedarte allí intentando animar algo moribundo.
Así que desde aquí pido a los emparejados que no sean aguafiestas y disfruten de una noche de celebración y baile hasta las tantas y, si tienen hijos, que los cuide la canguro por una noche. Asimismo, pido a los novios que inviten a solteros del género masculino desconocidos por las amigas de la novia. ¿No tenéis amigos? Pues buscaros amigos solteros unos días antes.
Ahora que leo mi post me doy cuenta que he dado una imagen muy materialista de las bodas. Permitidme ser una vez más políticamente incorrecta: yo creo en el matrimonio, en el compromiso conyugal y en el significado trascendental que tiene y me encanta compartirlo con las personas que quiero. Sí, soy una romántica perdida, quizá por eso así me va…
Ciertamente se van reduciendo la opciones conforme avanzas en edad... Tampoco creo en el mito que una boda genera otra, pero las películas muestran las bodas padrísimas a como en realidad suceden por lo menos acá en MX. Siempre los solteros que observas son los amigos del hermano menor, asi que las amigas de la que se casa pues ni al caso... detalles así por estilo.
Totalmente... Yo he notado a mi alrededor esta reducción de opciones...Pero lo que me asombra es que hay muchísimas más mujeres solteras que hombres ¿realmente somos mayoría en el mundo? Aunque después no se nota cuando hacen la una formación política o de un encuentro mundial...
Qué bueno. Si ya en la treintena se nota eso, no te cuento en los cuarenta. El tema de por qué hay menos solteros que solteras da para un "Misterios sin resolver".
Es un misterio que deberíamos dejar en manos de Iker Jiménez... Supongo que Mahoma se dio cuenta y por eso dio el visto bueno a la poligamia... y otras prácticas machistas...
El glamour de los hombres se pierde en el momento en que se tira el arroz como si fuera una batalla campal, cuando abren la boca durante la comida/cena y no tiene vuelta atrás tras beber el primer chupito. A partir de ahí un cumulo de despropósitos empieza a suceder hasta terminar con esa bajada de libido irrevocable de "fuera americana", el momento "corbata en la cabeza" y "palillo en boca". Ante tal situación, prefiero que haya mesas solo de solteras, aunque se cree esa inevitable rivalidad digna de egobloggers de "yo voy más divina".
Definitivamente, buscar un novio en una boda es como buscarlo en un after. Veneno, venero
Buenísimo Isabel. Creo que este comentario se tendría que añadir al post. Aunque entre soltera divina y corbata a la cabeza quizá la mejor opción es bailar a tu bola!!!!! ejjejeje
En eso de las prisas tienes toda la razón, yo ya tengo dos bodas para el año que viene de amigas que están en el umbral de los 30 y todavía estoy esperando alguna invitación mas... sea como sea, como amiga de la novia me considero con la responsabilidad moral de animar el cotarro hasta que se unda el barco. Y como bien dices, las solteras aportan la. elegancia y el salero a la fiesta post-boda. Disfrutemos de todas estas pequeñas reuniones, seamos solteras, con "relación complicada" o casadas (con o sin hijos)!
Ya se sabe que a los 30 empieza la maratón de bodas y debemos cumplir con nuestra obligación moral de darlo todo!!!! Gracias por el comentario!
En efecto, en un pestañeo se pasa del "todo el monte es orégano" a el "maríca el último".
De todos modos, a los 35 viene la segunda oleada (divorcios y separaciones), y se renueva el mercado.
XD.
Yo no voy a bodas, quizá pq no tengo amigas... (suena fatal, pero es que mi mejor amigo era mi ex y cd lo dejamos, me quede sin amigos tb...) Es algo misántropo y huraño, pero lo cierto es que sale muy económico, me libro de todos los compromisos!!!!
No quiero ser segundo plato....
TE ahorras un pastón!!!!
Querida Isa, en su día me gustó mucho esta entrada porque justo me acaban de invitar a un boda...ahora que tengo algo de tiempo para meditar sobre el tema me entra la agonía. Necesito ideas para aportar ese glamour sin caer en el travestismo. ¿te animas a un post o me mandas directamente al Foro Vogue?
Raquel! Perdona por no contestarte antes!!! Como puedes ver en mis post, me roban el tiempo!!!! Yo no soy muy experta en estilismo, aunque me encanta la moda y leerme revistas de esta temática. Un look depende del estilo de boda a la que vayas y también de cómo eres físicamente y personal! Yo últimamente si son bodas de tarde me cojo estos vesidos largos, vaporosos y me los pongo sandalias plans (soy muy alta) y me hago un recogido con trenzas o melena suelta con alguna florecita... En Mango hay vestidos largos super bonitos y muy bien de precio...La marca Veneno en la piel también tienen cosas muy chic y no es cara... Yo me muevo por aquí... Claro que todo depende de cómo seas tu y a qué tipo de boda vas!!!!